Conclusión Existen lecciones de nuestra experiencia que se aplican de manera universal a todas las empresas eléctricas. El hecho de que nuestra industria realice un trabajo altamente técnico cumpliendo estrictos requerimientos de desempeño no nos exime de la responsabilidad de involucrar a nuestras partes interesadas en la comprensión de nuestros esfuerzos diarios. El distanciamiento resultante del desconocimiento crea carencias y desactiva vínculos fundamentales para mitigar las emergencias y crear soluciones a las crisis. Estas situaciones se producirán con mayor frecuencia debido al cambio climático. Otro aspecto a tener en cuenta es mirar con atención a nuestro alrededor. Como estamos acostumbrados a encontrar soluciones expertas entre nuestras plantillas de ingenieros y técnicos, debemos superar la idea de que la única opción es desarrollar y dominar a nivel interno nuevas áreas de conocimiento. La única manera oportuna de responder a los efectos del cambio climático es aunar esfuerzos. Las empresas eléctricas deben centrarse en su experiencia principal y confiar en que los demás hagan lo mejor en sus áreas, con lo que también ayudarán a promover esas áreas de conocimiento. Debemos encontrar a los mejores en áreas específicas, desde el cálculo del índice de riesgo de incendios hasta el análisis de imágenes por satélite. Tenemos que desarrollar asociaciones en las que todos salgan ganando, con beneficios colaterales para otras partes interesadas que no nos verán como parte del problema, sino como promotores de soluciones. Reconocimiento Este artículo ha sido redactado en colaboración con Ricardo Messias, director de gestión de la vegetación de E-REDES. p&e enero/febrero 2022 ieee power & energy magazine 121