Power & Energy Magazine - Spanish - July/August 2019 - 88

cuantificación del valor de los ERS de una manera tecnológicamente neutral (no solo para la generación convencional
sino también para las IBR) sería beneficiosa para mejorar la
confiabilidad y la resiliencia. Por ejemplo, las IBR pueden
proporcionar márgenes de reserva si el ERS es abordado y
reconocido adecuadamente por los operadores del sistema y
en el mercado. Los mecanismos de mercado requerirían estándares de confiabilidad adecuados para poner precio a los ERS
proporcionados por todas las tecnologías. Además, el estándar del IEEE 1547-2018 (Estándar del IEEE para la interconexión e interoperabilidad de FED con interfaces asociadas
de sistemas de energía eléctrica) define las capacidades de los
ERS (es decir, respuesta de frecuencia, incremento y soporte
de tensión) para las FED conectadas a la red de distribución.
Otras preguntas planteadas fueron
✔ ¿Qué acciones podrían tomarse para garantizar que
haya suficientes ERS disponibles mientras la combinación de fuentes continúa evolucionando?
✔ ¿Existen beneficios o riesgos específicos planteados
por las fuentes de energía variable y las fuentes de
energía distribuida?
Los riesgos de escasez de combustible, la interrupción
del suministro y la alteración del servicio deben ser plenamente reconocidos en la evaluación de la seguridad de
la transmisión y los ERS para la red. Esta evaluación debe
diferenciar los suministros de seguridad energética y los
de combustible justo al tiempo que abordan la escasez de
combustible durante eventos extremos. Por ejemplo, durante
varios días en enero de 2018, el área de Nueva Inglaterra
continuó operando solo porque las instalaciones de generación que usan petróleo pudieron aumentar la producción de
su contribución típica (es decir, menos del 1 % de la generación total anual) a más del 35 % de generación total en
la región. Estas instalaciones corren un grave riesgo de ser
retiradas, y su probable pérdida desencadena la necesidad
de desarrollar un nuevo conjunto de alternativas de generación. Al igual que una cartera de acciones diversificada, una
combinación de generación diversa puede ayudar a proteger
contra el alza de los precios y la volatilidad asociada con
una dependencia excesiva en cualquier fuente de generación individual en un momento dado. Una combinación de
generación diversificada incluye todas las tecnologías: gas
natural, carbón limpio, energía nuclear, hidráulica y fuentes
renovables, así como almacenamiento de energía. Existe un
vínculo crítico entre la seguridad energética, la independencia energética, la resiliencia de la red y, en última instancia,
la seguridad nacional. A medida que los ataques planificados diseñados para infligir la máxima interrupción a las
operaciones de la red eléctrica se convierten en una preocupación creciente, una combinación diversa de generación
de electricidad absorbe, resiste y se recupera de un ataque
mejor que una tecnología de única generación o una fuente
de combustible.
Las siguientes son conclusiones y recomendaciones que
abordan la combinación de generación.
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1) Una combinación adecuada de tecnologías seguras
e independientes del combustible es clave para mantener suficientes ERS capaces de soportar interrupciones de los recursos primarios (por ejemplo, agua,
energía solar, eólica, gas natural, etc.), volatilidad de
los precios y desastres naturales y perturbaciones humanas en la red eléctrica. Por esta razón, se espera que
las fuentes de generación convencionales sigan siendo
críticas para la confiabilidad del sistema en el futuro.
2) Es importante definir estándares de confiabilidad actualizados, que tengan en cuenta los cambios en la
mezcla de generación. Los criterios de planificación y
operación del NERC (N-1) son difíciles de satisfacer
sin una generación confiable para redistribuir y mitigar
la violación de criterios. Por ejemplo, no hay criterios
de confiabilidad sistemáticos para la planificación y
los efectos operativos del sistema de suministro de gas
natural en el sistema de energía eléctrica.
Para abordar adecuadamente las necesidades modernas de
confiabilidad y resiliencia de la red, además del efecto de una
combinación de fuentes de generación cambiante en los ERS,
es necesario considerar eventos naturales extremos [como
terremotos, huracanes, inundaciones, incendios y perturbaciones geomagnéticas (GMD)], la vulnerabilidad de la seguridad
física y cibernética, la gestión y el mantenimiento de activos, y
la necesidad de contar con una fuerza laboral calificada.
En resumen, es fundamental contar con un marco normativo consistente que respalde las inversiones en la modernización de la red (incluida la implementación de tecnologías de monitoreo, protección, automatización y control;
infraestructura de telecomunicaciones; electrónica de
potencia; almacenamiento de energía y nuevos materiales)
a nivel estatal y federal para enfrentar los desafíos antes
mencionados.

Ascenso de las FED y lecciones
aprendidas
La adopción de las tecnologías FED en el nivel del sistema
de transmisión y distribución (T&D) se ha convertido en uno
de los impulsores clave para transformar la industria de los
servicios eléctricos públicos. Aunque el término FED se usa
comúnmente en la industria, no existe una definición uniforme. La National Association of Regulatory Utility Commissioners (NARUC) utiliza la siguiente definición general:
Una fuente ubicada cerca de los clientes que puede satisfacer todas o algunas de sus necesidades inmediatas
de electricidad y energía y que también puede ser utilizada por el sistema para reducir la demanda [como la
eficiencia energética (EE)] o proporcionar suministro
para satisfacer la energía, la capacidad o necesidades
de servicios auxiliares de la red de distribución. Las
fuentes, al proporcionar electricidad o energía térmica, son de pequeña escala, están conectadas al sistema de distribución y están cerca de la carga. Entre los
ejemplos de los diferentes tipos de FED se incluyen
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