IEEE Power & Energy Magazine - Spanish - Noviembre/Diciembre 2017 - 18

editorial invitada

J. Charles Smith

un protagonista principal
las energías renovables ahora son lo convencional

D

DURANTE LOS ÚLTIMOS 25
años, el Grupo de integración de
-generación variable de servicios públi-
cos (UVIG, por sus siglas en in-
glés) se ha centrado en la integración
de la potencia eólica y, más reciente-
mente, de la potencia solar en los siste-
mas de potencia eléctrica. Recuerdo los
argumentos en los primeros días sobre
cuál podría ser el límite máximo de pe-
netración de la potencia eólica antes de
que el sistema de potencia se volviera
inestable y se desmoronara. Ahora la
conversación versa sobre cómo inte-
grar plantas de potencia basadas en in-
versores en redes débiles, pero también
cómo diseñar una red para una gene-
ración 100% no síncrona. ¡Caramba,
cómo cambian los tiempos! Creo que
hace ya por lo menos un año que nadie
me pregunta por la cuestión de la pene-
tración máxima.
Todavía hay trabajo por hacer, pero
la naturaleza del discurso sin duda ha
cambiado. Las energías renovables
ahora son lo convencional. La gente
ya no se ríe de ti cuando hablas de la
energía eólica y solar como fuentes
principales de energía. Mientras escri-
bo esto, acabo de ver un informe de la
Administración de información ener-
gética (EIA, por sus siglas en inglés)
que afirma que la energía eólica y so-
lar proporcionaron más del 10% de la
electricidad de Estados Unidos en mar-
zo de 2017, el primer período mensual
en dos dígitos. El total acumulado para
Identificador de Objeto Digital 10.1109/MPE.2017.2729080
Fecha de publicación: 18 de octubre de 2017

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el 2016 fue del 7%. La atención ya no
se centra en cómo integrar esas formas
extrañas de generación marciana en la
red, sino en cómo integrar los sistemas
de energía del futuro, de los cuales los
sistemas de energía renovable son una
parte importante, en un todo coherente.
¿Cómo hemos llegado hasta aquí?

Reducciones drásticas de
los costos
Uno de los principales impulsores ha
sido reducción de costos. Tanto la pro-
ducción eólica como al solar han ex-
perimentado reducciones drásticas de
los costos en los últimos cinco años.
Lazard ha publicado un informe com-
parativo del costo de la energía durante
al menos los últimos cinco años. En él
se muestra un rango de costos de ba-
rra colectora para todas las principales
fuentes de energía, calculados con base
en el costo nivelado de la energía. Creo
que ofrece una buena comparación,
aunque desde luego no es perfecta. El
informe presenta los rangos de costos
para cada tecnología en función de los
supuestos claramente establecidos.
En el último informe, de diciembre
de 2016, la eólica es la fuente de ener-
gía con el menor costo, con un rango de
32 USD-68 USD/MWh, seguido de la
energía solar fotovoltaica (FV) de pelí-
cula fina a 46 USD-56 USD/MWh. La
opción de combustible fósil de menor
costo es un ciclo combinado de gas na-
tural a 48 USD-78 USD/MWh. El car-
bón está a 60 USD-143 USD/MWh y
la energía nuclear a 97 USD-136 USD/
MWh. Las cifras de energía eólica y

FV son costos sin subvención y las ci-
fras de combustibles fósiles no reflejan
ningún costo medioambiental. He visto
acuerdos de compra de potencia eóli-
ca (PPA, por sus siglas en inglés) a 14
USD/MWh y acuerdos de energía foto-
voltaica por debajo de 35 USD/MWh,
cuando se incluyen los incentivos ac-
tuales. Se trata de cifras alucinantes.

Las corporaciones
estadounidenses
han tomado nota
La energía limpia y sostenible se ha
convertido en un objetivo para las
corporaciones estadounidenses; me
refiero a las empresas de Fortune 500
como Apple, Google, Tesla, Microsoft,
Disney, GM, IBM y Walmart. Y la lis-
ta continúa. La mayoría de las grandes
corporaciones ahora tienen un respon-
sable de sustentabilidad corporativa y
objetivos de sustentabilidad corporati-
va. Esto se está logrando mediante una
combinación de compra de créditos de
energía renovable, la celebración de
PPA y el desarrollo de proyectos priva-
dos. Son impulsados por la presión de
los accionistas, empleados y clientes; la
gente quiere energía limpia. Histórica-
mente, esto no ha sido un tema político
partidista, ya que reunió un fuerte apo-
yo en ambos partidos políticos princi-
pales. La medida en que esto continua-
rá es una pregunta abierta.
La decisión del presidente de Esta-
dos Unidos de sacar al país del acuer-
do climático de París ha cuestionado el
apoyo tradicional a la política de energía
limpia de Estados Unidos. Esta medida
noviembre/diciembre 2017
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